miércoles, 18 de marzo de 2020

Sin visita por cumpleaños

Este aniversario no vine por aquí.

Yo no he sido una persona que se distinga por su empuje. Es cierto que de joven, cuando el portal literario se me iban las noches en un afán perfeccionista que después he ido perdiendo. Me termo que quede embrujado por aquello de Sabina de que Casi todo es casi nada. Tan poético y certero. Tan de llegar al corazón como las pérdidas o el pasado. Partiendo desde ahí el desánimo había de crecer. De ser verdad, que puede serlo, entronca en el mismo núcleo de la vida e invita a embarcarse en pocos proyectos. Es una idea incapacitante sí, pero también sanadora por cuánto ayuda a relativizar cualquier suceso que pase. Luego he sabido, mediante análisis, que tengo el ácido fólico en reserva, y la médico, en los tiempos en que se dedicaban a algo más que a tratar coronavirus, me puso unas pastillas para incrementarlo a la vez que a mí me ha nacido una nueva energía para hacer cosas. Justo ahora que hay menos para hacer.