viernes, 25 de enero de 2002

25/01/02 15:45

El Palencia ha fichado a un venezolano que era mu buena persona, pero mu engañau. Allá en las Venezuelas le dijeron que si llevaba una cuanta de coca, y otra cuanta de heroína o lo que sea, le darían mucho dinero bueno. Y él se vino pa España a cumplir su marronero cometido. El caso es que la poli, que a veces mira con los ojos achinaus, fijándose mucho, se dijo:

- Tate, éste venezolano no lo veo yo mu limpio.

Y lo pescaron, invitándole de paso a visitar nuestras cárceles, que son mu bonitas y espaciosas, dan unos bocatas de jamón de aquí te espero, que se lo digan al señor De la Rosa, que cambió los restaurantes de lujo por un buen bocata a la sombrecita.

Ahora, al venezolano engañau, se le ofrece trabajar jugando al fúrbol de Villar. Es su oportunidad de rehacerse, rehabilitarse, y quien sabe si de soñar con jugar un día en primera, poniéndole la espinilla escocía lo mismo a Figo que a Rivaldo.

La vida tiene a veces sorpresas mu sorprendentes. Anda que no habrá chavaletes por ahí palmando de hambre, sin poder siquiera traficar como no sea con las ganas de comer. Pero eso no es noticia. Ellos sabrán jugar ar fúrbol lo mismo que el muchacho éste, pero el Palencia ha lograu una repercusión que ni el archiconocido comité de disciplina deportiva y sus desbaratadas decisiones.

No tenemos en España nada tan bonito. Al chico aquel al que le pusieron por mal nombre: "El violador del ascensor" solamente porque había forzado a unas cuantas muchachas a hacer unas tonterietas. ¡Demontre, las había intentado hacer experimentar nuevas sensaciones! Que llevara un corta plumas, machete o como quieras llamarle no era sino para terminar de convencerlas. Pues a este engendro, la Generalitat catalana, con Jordi Pujol "al cap", le buscó un pisito y un trabajo.

- Oiga, pa rehabilitallo. No vaya a ser que "tando ocioso" le dé por sacarse punta a las ideas.

Y a los que no violamos, robamos, traficamos, que nos den morcilla con queso (ni siquiera bocata jamón de gratis). Nosotros nos buscaremos la vida en el lado tranquilo de la ley. ¿Harán algo por nosotros? Tén musha suerte mushasho.



Pagando los impuestos escrupulosamente, por más que haya mangones sueltos, corrupción a espuertas, y oscurantismos que no vemos ni oímos. Boca mía ¿qué digo? Divino tesoro.