Dejo aquí anotado que los últimos días dice que sus primitos son sus amigos. Y a mí esto me alegra y me entristece a un tiempo. Al pobre no lo llevamos a la guardería desde marzo y no tiene más.
Me dice a menudo - Puedo ayudarte? Y yo lógicamente me derrito. Cuando se pone manos a la obra ya es para hacerlo él solo. Me dice:
- Tranquilo Papi, yo puedo.
Y yo muero de amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario