Leo que un surcoreano de 28 años ha muerto tras pasar 50 horas conectado a Internet, entretenido con un juego del tipo simulador de guerra. Durante tres días apenas descansó sino para comer algo y hacer algún descansillo en una cama improvisada. Ni siquiera estaba en su casa, se conectó desde un ciber. El muchacho había dejado el trabajo para poder jugar más y mejor. El día de su muerte su propia madre había llamada a los antiguos compañeros de trabajo por no haber sabido nada en varios días.
Yo que abandoné la televisión por la Red, que espacié los libros para leer por asomarme a este mundo virtual me quedo mudo ante noticias así. Me alegro de que la mía sea una adicción controlada, que no perdona una paellita en la playa junto a la familia.
Internet es un gran invento, pero la gente debe seguir hablando de persona a persona.
No hay comentarios:
Publicar un comentario